Lo primero que queremos indicar es que estamos delante de un cambio de esos que no parecen a primera vista, completamente radicales pero que sin embargo nos trae unas sensaciones completamente diferentes.
Si hablamos de la carcasa tenemos un nuevo diseño de materiales que reduce las capas del mismo de cinco a tres, lo que nos da una carcasa mucho mas blanda y cómoda que la de la generación anterior, pero sin renunciar a la esencia de bota pegada y ajustada que es Nike Mercurial.
Es muy cómoda desde los primeros usos y es relativamente adaptable a los pies anchos, sin ser una bota pensada para ellos los amigos y amigas con el pie más ancho también pueden probar las sensaciones de Mercurial.
Si pasamos al toque gracias al nuevo diseño de la carcasa, tenemos el Gripknit que viene directamente de las Nike Phantom y que nos da ese extra de toque que sin llegar a ser ese toque pegajoso que tenemos en Phantom, si que se puede notar. Es algo que en combinación con la nueva carcasa nos da un combo sensacional.
Nos vamos ahora a la suela que nos trae de nuevo esos tacos en forma de flecha que tanto hemos visto a lo largo de los años en Mercurial y además tenemos nuevamente la unidad de Airzoom algo reducida en tamaño pero que nos sigue brindando ese “rebote” cuando pisamos el terreno de juego.
Bota Air Zoom Mercurial Superfly 10 Elite SG-Pro Black-Black-Deep Jungle
En conclusión, un botón, las sensaciones son brutales y se adaptan de fabula a la nueva era del fútbol, un futbol rápido, de presión extrema donde tener un soporte como estas Mercurial es un acierto de pleno. Una de mis favoritas de los últimos años, Nike lo ha vuelto a hacer.