Pese a su juventud, Nico Campuzano ha jugado ya en varios de los mejores equipos de España. Un buen juego de pies, valentía en el juego aéreo y sobre todo mucho poso y serenidad bajo palos le definen. Nico nos cuenta su experiencia en el campus de Santoña, al que todavía hoy sigue acudiendo a visitar amigos, como se puede compaginar el alto nivel deportivo con los estudios y sus referentes en el mundo de la portería, en el pasado y en el presente. Quien sabe si en el futuro él sea el espejo para los jóvenes porteros que sueñan con hacerse un hueco en el profesionalismo.
Es un placer poder compartir esta entrevista con un viejo conocido nuestro. ¿Cómo conociste Futbol Emotion? (Antes Soloporteros)
Fue hace ya 7 años, con el primer campus de Santoña. Tenía claro que quería aprovechar el verano para entrenar y mi padre se enteró de que había un campus cerca de casa, así que no lo dudé. Entonces era muy difícil encontrar campus para porteros, y además los entrenamientos que ofrecían en Santoña eran de calidad. Decidí probar… y acabé repitiendo los siguientes tres años, hasta que los clubes donde jugaba dejaron de permitírmelo.
Sabemos que además de asistir cuatro veranos a nuestros Campus Elite de Santoña lo sigues visitando siempre que puedes. ¿Qué opinas de este evento? ¿Recomendarías estos eventos a los chicos y chicas que están empezando y tienen especial ilusión en aprender y perfeccionar sus habilidades como porteros?
Es un evento muy recomendable para cualquiera que busque salir de casa en verano para convivir con otros chicos, como en cualquier campamento, y además le guste entrenar y quiera mejorar como portero. La semana es muy intensa en todos los aspectos, ya que combina la convivencia diaria con dobles sesiones de entreniento, por lo que tiene lo mejor de las dos cosas.
Además de pasarlo bien y hacer amigos, realmente se puede aprovechar para mejorar todos los aspectos del juego gracias a entrenadores con experiencia que siempre ayudan, así que en mi opinión merece la pena del todo.
Ya hemos comentado antes parte de tu dilatada trayectoria. Pero, ¿cuándo empiezas a querer dedicarte a esto?
El sueño está ahí desde el momento que empiezo a jugar, ya que practicaba más deportes pero este era el que me gustaba de verdad. Creo que nos pasa a todos los que empezamos a jugar al fútbol porque nos gusta, aunque no sea la meta principal.
Luego llega un momento que, si te van bien las cosas, empiezas a ver cómo es la dinámica más “profesional”, aún dentro de categorías inferiores. En mi caso, después de mi primera temporada en un club profesional como es el Racing de Santander, tuve claro que esto era lo que quería e iba a darlo todo. Tenía 12 años.
Pese a lo joven que eres ya has jugado en varios de los clubes más importantes de este país. ¿Con qué te quedas de todo ello?
Cada club es un mundo, y en este caso fuera de casa cada sitio te cambia completamente la vida: el entorno, las amistades, las experiencias… Creo que estas cosas son las más importantes en cualquier aspecto, y la posibilidad de conocer tanta gente y vivir tantas experiencias mientras haces lo que te gusta es un auténtico sueño.
En el aspecto futbolístico, sobre todo la variedad de enfoques que hay de un club a otro. Eso te permite ver y aprender de muchas maneras distintas de trabajo, y de todas se puede sacar cosas buenas, al igual que pasa en la vida.
¿Cómo se compagina tantos años fuera de casa a este nivel con el tema de los estudios o el trabajo?
Los estudios pueden ser un tema complicado a partir de un cierto nivel tanto académico como deportivo, pero por mi experiencia y la de otros compañeros, la dificultad real no llega hasta empezar y/o empezar a entrenar por las mañanas. Yo el año pasado ya empecé a entrenar por las mañanas y tuve que comenzar la universidad a distancia, que supone bastante esfuerzo, pero para mí merece la pena. Nunca antes he tenido dificultad para compaginarlo. Hasta entonces, el único problema que puede haber es que alguien no quiera realmente estudiar, pero eso pasa igual en gente que no hace deporte.
Todos los clubes que conozco dan facilidades para estudiar a quien quiere, pero sí que es cierto que el entorno puede hacer más difícil que alguien se lo tome en serio. Sin embargo, con las ideas claras, siempre hay tiempo para todo.
Y ahora en la UD Las Palmas, ¿cómo está yendo la temporada y qué objetivos te planteas?
De momento estoy muy contento, tanto en el club como con la vida en general en Las Palmas. El objetivo a corto plazo es mejorar día a día e ir cogiendo minutos en Tercera, que ya es una categoría complicada para los jóvenes y se trata de ganar experiencia. A largo plazo el objetivo es el de siempre, a través de la mejora diaria poder llegar a competir en el fútbol profesional y buscar siempre el máximo nivel que uno puede dar.
Un gran juego de pies, muy maduro pese a tu juventud, rápido en las salidas... ¿Cómo te defines como portero?
Como portero me gusta tratar de defender el mayor espacio posible. El juego aéreo es uno de mis puntos fuertes y soy atrevido en las salidas, aunque bajo palos es otros de los aspectos que mejor se me da. Me comunico constantemente con los compañeros y trato de organizar y ayudar a la línea defensiva siempre que puedo. No me gusta correr riesgos innecesarios atrás.
¿Qué portero o porteros destacas a día de hoy? ¿Tienes algún modelo en el que te fijas?
De pequeño, siempre me fijaba en Van der Sar, el ex-portero del Manchester United y Holanda. Hoy en día, aunque podría destacar a muchos, el que más me gusta es Hugo Lloris, del Tottenham.
¿Qué portero ha sido el que más te ha impresionado y por qué?
El portero que más me ha impresionado es Ter Stegen, del Barcelona. Más allá de su calidad como portero, la madurez y la templanza que muestra en el campo no son normales, y menos a su edad. Creo que es el mejor en el aspecto mental, los errores que pueda cometer no le afectan lo más mínimo, aunque le cuesten un gol. Eso es algo realmente difícil.
Para ir acabando, ¿qué consejo le darías a todos aquellos porteros que están empezando y sueñan con llegar a un club de referencia en España como tu?
Mi primer consejo si en su club no disponen de un entrenador de porteros que les pueda ayudar, es tratar de buscar este recurso en academias como la vuestra. El portero necesita entrenamiento específico. A partir de ahí, siempre es dar el máximo y tratar de disfrutarlo. Combinando estas dos cosas, los resultados siempre serán mejores.
Y por último, ¿te veremos este verano por alguno de nuestros eventos?
Como de costumbre, siempre que puedo visito el campus de Santoña. El pasado verano ha sido el primero que no he podido acercarme, pero espero no fallar el próximo!
Muchas gracias! Y mucha suerte tanto para ti como para tu equipo durante el resto de la temporada.
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